Diferencias entre la teja asfáltica y la lámina de metal

Diferencias entre la teja asfáltica y la lámina de metal

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En el ámbito de la construcción, la elección del material para el techo es una decisión crucial que influye en la durabilidad, la estética y el rendimiento a largo plazo de una estructura. 


Entre las opciones más comunes se encuentran la teja asfáltica y la lámina de metal, dos materiales que presentan características distintivas y que son objeto de comparación constante por parte de profesionales del sector y propietarios de viviendas.

La teja asfáltica, es un material compuesto por una base de fibra de vidrio o fieltro saturado con asfalto y recubierto con gránulos minerales para mejorar su resistencia a la intemperie y proporcionar una apariencia estética. Por otro lado, la lámina de metal, fabricada típicamente en acero galvanizado o aluminio, ofrece una alternativa duradera y resistente a la intemperie, caracterizada por su versatilidad y bajo mantenimiento. De este modo, a continuación se ahondará en las principales diferencias de cada una.

Clima

  • Las tejas asfálticas son altamente resistentes a una variedad de condiciones climáticas adversas. Los fabricantes suelen establecer especificaciones estrictas para la instalación en zonas de fuertes vientos, lo que incluye el uso de refuerzos adicionales y sellado manual con adhesivo asfáltico para resistir vientos de hasta 200 km/h. Además, las tejas asfálticas han demostrado una excelente resistencia a la nieve, el calor, el granizo y las tormentas fuertes. También son altamente resistentes a impactos de árboles, granizo y pueden soportar el peso de una persona sin romperse.
  • La lámina de metal es conocida por su resistencia a las inclemencias del tiempo, incluidas lluvias intensas y vientos fuertes de hasta 220 km/h. Sin embargo, es importante considerar el tamaño de las láminas de metal, ya que las hojas muy grandes pueden levantarse fácilmente con el viento. En zonas donde la nieve es común en invierno, el metal puede presentar el desafío de que la nieve se deslice rápidamente, similar a una avalancha. Por lo tanto, se recomienda instalar protectores de nieve en varios puntos a lo largo del borde del techo para evitar la acumulación excesiva de nieve y el riesgo de deslizamiento repentino.

Apariencia

  • Las tejas asfálticas son altamente versátiles en términos de apariencia y diseño. Con varios modelos disponibles en el mercado, algunas pueden imitar la apariencia de techos de pizarra, madera o piedra, lo que las hace adecuadas para una amplia gama de estilos arquitectónicos. La variedad de colores disponibles, incluidos 14 tonos diferentes en el caso de las tejas arquitectónicas de diseño superior, permite una personalización significativa que puede complementar cualquier diseño arquitectónico, ya sea moderno, tradicional, contemporáneo o rural. Además, su capacidad para instalarse en superficies curvas, domos y paredes aumenta su versatilidad y aplicación en diversos proyectos de construcción.
  • La lámina de metal tiende a ofrecer un estilo más rural en comparación con las tejas asfálticas. Aunque es posible pintar las láminas de metal en una variedad de colores, su apariencia no siempre coincide con el diseño de hogares modernos o contemporáneos. Esto puede limitar su atractivo en ciertos entornos arquitectónicos donde se busca un estilo más sofisticado o personalizado.

Peso

  • Las tejas asfálticas son los materiales de techado menos pesados disponibles en el mercado. Aunque son más ligeras que otros materiales como la cerámica o el concreto, aún ejercen cierta presión sobre la estructura, especialmente a medida que envejecen y absorben agua, aumentando su peso y la carga sobre la estructura.
  • Las láminas de metal son extremadamente ligeras en comparación con otros materiales de techado. El metal es uno de los materiales más ligeros que se pueden seleccionar para un techo, lo que significa que ejerce mucha menos presión sobre la estructura de la vivienda. Esta característica es especialmente beneficiosa para estructuras más antiguas o con limitaciones de carga, ya que reduce el riesgo de tensiones adicionales en la estructura. Además, el metal es resistente a la absorción de agua, lo que significa que su peso se mantiene constante a lo largo del tiempo, sin el riesgo de saturación y aumento de peso asociado con las tejas asfálticas.

Costos

  • Generalmente, las tejas asfálticas son más económicas en términos de costos iniciales, tanto en materiales como en instalación. Su disponibilidad generalizada y su proceso de instalación relativamente sencillo contribuyen a su atractivo económico.
  • La lámina de metal tiende a ser más costosa que las tejas asfálticas en términos de costos iniciales. Sin embargo, su mayor durabilidad puede resultar en ahorros a largo plazo, ya que requiere menos mantenimiento y tiene una vida útil más prolongada.
  • Con las tejas asfálticas, solo hay un 3% de material desperdiciado, mientras que con las láminas de metal, el desperdicio es del 30%. Esto se debe a que las láminas de metal tienen mucha superposición de paneles y cuando necesitas cortarlas para ajustarlas a las medidas requeridas, los recortes no se pueden reutilizar y terminan siendo desechados, lo que resulta en una pérdida significativa de material, algo que no sucede con las tejas asfálticas.

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Mantenimiento

  • Las tejas asfálticas son más fáciles de reparar que las láminas de metal. Un techador puede reemplazar una sola teja o reparar un área con relativa facilidad. Esto permite abordar problemas específicos de manera rápida y eficiente sin la necesidad de realizar grandes trabajos en todo el techo. Además, las tejas asfálticas suelen tener un tratamiento anti algas que les proporciona resistencia y evita que el techo se manche con el tiempo. Esto contribuye a mantener la apariencia estética del techo a lo largo del tiempo con un mantenimiento mínimo.
  • Reemplazar un panel en un techo de metal es más difícil debido a la forma en que está instalado y cómo están conectados los paneles. Esto puede requerir más tiempo y esfuerzo por parte de un profesional. Además, las láminas de metal pueden corroerse o mancharse con el tiempo, especialmente si no se les proporciona un mantenimiento adecuado. Es importante realizar inspecciones periódicas y realizar mantenimiento preventivo para prolongar la vida útil del techo de metal y evitar problemas costosos en el futuro.

Instalación

  • La instalación de tejas asfálticas es relativamente sencilla y puede llevarse a cabo con herramientas simples como martillos y pistolas neumáticas. Esto facilita que los instaladores suban los paquetes de tejas al techo y procedan con la instalación de manera eficiente. La simplicidad del proceso y la disponibilidad de herramientas básicas hacen que la instalación de tejas asfálticas sea más accesible para aquellos que deseen realizar el trabajo por sí mismos.
  • La instalación de láminas de metal requiere la contratación de un contratista de techado profesional debido a la dificultad del trabajo. Se necesita más tiempo para la instalación del techo con materiales metálicos, lo que puede incrementar los costos laborales. Además, la instalación incorrecta es una de las principales causas de problemas en los techos de lámina de metal, por lo que es fundamental encontrar a un instalador profesional y calificado con experiencia específica en este tipo de techos. 

Durabilidad

  • La durabilidad de las tejas asfálticas varía según el grosor y el modelo, con garantías que van desde 25 años para las tejas tradicionales de 3 lengüetas hasta garantías de por vida (50 años) para modelos premium. Las tejas asfálticas están diseñadas para resistir una amplia gama de condiciones climáticas y no requieren mantenimiento regular. Su durabilidad está relacionada con el grosor y la calidad del material, lo que les permite conservar su integridad estructural a lo largo del tiempo sin deformaciones significativas, oxidación o fragilidad.
  • La durabilidad de las láminas de metal depende del calibre del metal utilizado, con calibres más bajos que generalmente indican una mayor calidad y durabilidad. Los fabricantes suelen ofrecer garantías de producto entre 20 y 30 años, aunque las láminas de metal pueden durar hasta 50 años en condiciones óptimas. Sin embargo, a lo largo del tiempo, pueden sufrir daños por oxidación, abolladuras causadas por granizo u otros impactos, así como deformaciones si se camina sobre ellas. Es importante tener en cuenta que los cambios de temperatura pueden provocar la expansión y contracción del metal, lo que puede aumentar el riesgo de filtraciones de agua si hay huecos entre las láminas o los tornillos se aflojan. En general, las láminas de metal de calibre 24 se consideran las más duraderas y de mejor calidad disponibles en el mercado.

Aislamiento térmico

  • Debido a sus propiedades físicas, las láminas de metal son excelentes conductores de temperatura, lo que puede permitir el paso del frío y del calor hacia el interior de la casa. Para contrarrestar esta debilidad, es necesario considerar estrategias complementarias de protección térmica, como la instalación de una cámara ventilada o el uso de aislantes térmicos.
  • La composición de las tejas asfálticas, con fibra de vidrio cubierta con asfalto oxidado y gránulos diseñados con pigmentos reflectantes de infrarrojo, contribuye a reducir la radiación solar y aislar térmicamente la casa. Estos materiales no transmiten tanto calor por naturaleza, lo que ayuda a mantener una temperatura más estable en el interior del hogar. Además, algunos colores de tejas asfálticas, como el blanco y el gris claro, tienen puntos LEED en reflectancia solar, lo que potencia aún más su capacidad de aislar térmicamente el espacio. 

Aislamiento acústico

  • Una de las principales ventajas de la teja asfáltica es su propiedad para aislar los ruidos externos. Gracias a su composición, las tejas asfálticas permiten reducir significativamente la transmisión de sonidos exteriores al interior del hogar. Esto significa que los sonidos de la lluvia, el granizo o el viento se amortiguan considerablemente, creando un ambiente interior más tranquilo y confortable.
  • La lámina de metal es transmisora acústica, lo que significa que cualquier sonido exterior, como la lluvia o el viento, puede percibirse con mayor intensidad dentro del hogar. Incluso sonidos de menor intensidad pueden parecer más fuertes debido a la naturaleza conductora del metal. 

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